No busco nada. No busques nada. Todo es producto de nuestra imaginación.

jueves, 22 de noviembre de 2007

GRANDE



¿Qué haríamos sin internet? Yo creo que no sabría vivir sin este medio. Precisamente hoy, gracias a mis vicios internautas, me he enterado de que a Manuela Carrasco Salazar le han concedido el Premio Nacional de Danza 2007. Acabo de ver en la nueva web de El Correo de Andalucía, que visito cada día porque me gusta leer los artículos de mis amigos y, también, porque ofrece una información muy local. De hecho, el resto de webs daba la noticia dentro del Premio Nacional de Letras a Ana María Matutes y El Correo destacaba lo de Manuela Carrasco.

Seguro que el gran crítico de flamenco Manuel Bohórquez está contento. No es para menos. Manuela Carrasco es una bailaora de raza, de poderío y fuerza. Vamos, de las que quedan pocas. Su estilo no responde tanto por la técnica que utiliza sino por la garra que imprime en cada paso de baile. De hecho, traslada al público esa fuerza, ese sentir del flamenco desde dentro o, como dirían los entendidos, desde las entrañas.

Recuerdo la primera vez que la vi. Fue en la Bienal de Flamenco de Málaga de 2005. Iba con mi Antonia Carmen y nos quedamos embobadas. Nos encantó las bulerías que se bailó con su primo Manuel, el padre de la petarda de Alba Molina, esa que cantaba con Las Niñas. El caso es que nos trasmitieron improvisación, sentimiento y muchísimo duende flamenco. Por actuaciones como estas y muchas más, creo que el galardón está merecido de sobras. ¡Felicidades, Manuela!






1 comentario:

Carmenchu dijo...

¡Qué bien estuvo esa Bienal! y que fin de semana más... ¿diferente? ¡la culpa de todo la tuvo Malú! jajaja. Hay que volver a aquella feria extraña.