No es un caso cualquiera

Merecen este post. Sin duda alguna. Dos periodistas a los que una realidad cruel ha invadido por completo. Los ha invadido hasta hacer que dejen su coraje periodístico entre palabras y frases de un periódico nacional. Desde el viernes no dejan de dar buenas noticias en Público y eso merece un post, amigos. No es por ello sorprendente que ambos escriban en sus respectivos blogs (1 y 2) de la pequeña Mari Luz. Al igual que no sorprende el que un tipo, en su día corresponsal del periódico El País en Londres, escribiera Historias de Londres. Grande, sin duda, el tipo. Grandes, sin duda, mis ex compañeros y, sin embargo, amigos.