Viernes noche. Sin plan a la vista. Mis padres me maltratan con sus gustos televisivos. Es lo que yo llamo maltrato televisivo, algo que sufro cada lunes (¡Mira quién baila!) y viernes (Menuda noche). Tras una semana de infarto, de trabajar y trabajar, hoy no paro de pensar en una teoría, esa de la que tú y yo hablamos muchísimas veces. La llamamos la Teoría de la Gorda. Si cumples estos requisitos, está claro que la sigues:
-Estás a dieta continuamente.
-Recuperas lo perdido en un sólo mes o, como se diría en mi pueblo, de una sola zampá.
-El día antes de comenzar una dieta es el fin del mundo. Comes de todo.
-Cuando vas a un restaurante, siempre eliges en la carta por lo más sabroso.
-El postre siempre se comparte. Así puedes probar más tipos.
-Ante carne o pescado, siempre carne.
-Recuerdas los lugares visitados por su comida.
-No soportas los platos "finolis", esos que te ponen una lechuga carbonizada con nitrógeno.
-No entiendes a los vegetarianos: ¿Qué hacen con el jamón?
-Tienes dos tallas en tu armario: la de delgada y la de gorda.
En fin, podría seguir y seguir. Qué duro todo!!!!!
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